PALCO PREMIER: LA SERIE DEL CARIBE Y SU CRECIMIENTO CUANTITATIVO
Jorge Luis Telles Salazar
Tras 13 años de ausencia, la Serie del Caribe regresa a Venezuela, donde se desarrollará la edición número 57 del máximo torneo del béisbol latino en su era moderna, misma que inició en 1970, precisamente en territorio bolivariano. La primera etapa, para su información, se llevó a cabo entre 1949 y 1960, con Cuba como apabullante dominador, secundado de algún modo por Puerto Rico.
La Serie del Caribe, que congrega a los campeones de las ligas invernales de béisbol de los países afiliados al organismo rector y a la que han asistido recientemente algunas naciones invitadas, contará, por vez primera, con la participación de ocho equipos, lo que la dará al torneo dos días más de vida, con respecto a los últimos eventos de esta naturaleza.
Venezuela fue organizador del certamen, por última vez, en 2010 en Isla Margarita; pero en los años posteriores cedió su derecho como sede a otros países por cuestiones eminentemente políticas, traducidas en una severa crisis económica en la nación bolivariana. Representaciones venezolanas, sin embargo, si participaron en competiciones posteriores, alentadas por los cuestionados gobiernos de Chávez y Maduro, bajo la bandera de un patriótico nacionalismo.
De hecho, de tres años a la fecha, Venezuela exigía convertirse en anfitrión, sede y organizador; pero sin garantizar las condiciones apropiadas para ello. Su petición había sido rechazada por la confederación que dirige el dominicano Juan Francisco Puello Herrera, hasta que llegó esta nueva edición del béisbol de invierno en los países de América Latina.
Y aquí está, ahora, la Serie del Caribe Venezuela-2023, bajo augurios de éxito, con más participantes y con un práctico sistema de competencias.
A seguir la serie de cerca, que nos vamos a entretener.
Ojalá.
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Y bueno.
En el curso de los últimos años, la Serie del Caribe ha experimentado un crecimiento cuantitativo, sin deterioro de su calidad, aunque sin llegar a los niveles de antaño. Por mucho tiempo se jugó con solo cuatro equipos, representantes de México, Puerto Rico, República Dominicana y Venezuela. El número de competidores se incrementó a cinco, luego a seis y ahora a ocho.
Además de los señalados se confirmó la participación de Colombia y Panamá y se invitó a Cuba y Curazao.
Los ocho protagonizarán un round robin durante los próximos siete días, al término de los cuales cuatro avanzarán a una ronda de semifinales y los otros cuatro regresarán a casa. En semifinales, el ocupante del primer lugar se enfrentará al cuarto y el segundo al tercero. Los dos ganadores chocarán por el campeonato y los dos perdedores por el tercer lugar.
Suena interesante y lo es de hecho.
Garantizado que quienes ocupen los cuatro primeros sitios serán los mejores de la competencia, lo que es de justicia elemental. En los sistemas anteriores el factor suerte desempeñaba un papel preponderante.
Por cuanto a los equipos, déjeme contarle que, como usted sabe, Cañeros de los Mochis representará a México; Tigres de Licey, a República Dominicana; Indios de Mayagüez, a Puerto Rico; Leones de Caracas, a Venezuela; Federales de Ohuirique, a Panamá; Vaqueros de Monteri, a Colombia; Agricultores, a Cuba y Wild Carts, a Curazao.
La sede principal es el estadio La Rinconada del llamado Gran Caracas; la subsede, el de la Guaira. La actividad arrancará todos los días a partir de las 10:30 horas.
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Bien.
Cañeros de los Mochis inicia su participación en el encuentro de las 12: 00 horas en La Rinconada, parque con capacidad para 40 mil espectadores, lo que lo convierte en el más grande entre todos los países de habla hispana, en los que se juega beisbol. Ahí mismo, a las 20: 30, el duelo estelar entre Venezuela y Panamá, después de la ceremonia inaugural.
Mochis esta en Caracas en su condición de campeón de la Liga Mexicana del Pacífico; pero solo con diez de los 24 peloteros que se coronaron el domingo próximo pasado. Hay 16 refuerzos, elegidos de entre el resto de los equipos del circuito invernal mexicano.
Es un buen equipo, de hecho; pero no será fácil llegar hasta la ronda final. Los tradicionales están armados hasta los dientes, como suele decirse.
México, luego de una buena racha, no gana un campeonato en Series del Caribe desde 2016. Está atorado en nueve, uno más que Venezuela.
Lo hizo en Santo Domingo, a través de los Venados de Mazatlán, cuando un jonrón de Jorge “Chato” Vázquez contra Venezuela se convirtió en el tablazo estelar de la Serie. De entonces a la fecha, solo aproximaciones y nada más.
Suerte para los nuestros.
La van a necesitar…
